Tras el inicio de la administración del presidente Joe Biden, 40 de los 54 agentes de la Agencia de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) que operan en territorio mexicano estarían aprestándose para dejar el país y ser reubicados, tanto en Estados Unidos como en otros territorios.
Esto fue publicado como noticia exclusiva por el portal digital La Política Online. Dicha página asegura que esto fue revelado por fuentes al interior de Palacio Nacional, en un movimiento que perciben como inusual en las autoridades estadounidenses, incluso durante cambios de gobierno.
La misma fuente reporta que, de acuerdo con integrantes del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) se sabe que la mitad de los agentes antidrogas estadounidenses que saldrán de México regresarán a continuar con sus labores en su país; mientras que los otros 20 serán reacomodados en otros países de la región, lo cual sugiere un cambio drástico en la estrategia de combate al narcotráfico.
El mismo sitio especula que esto tiene que ver con un cambio de perspectiva por parte del nuevo fiscal general de los Estados Unidos, Merrick B. Garland, y su segunda al mando, la exasesora de Seguridad Nacional, Lisa Monaco; quienes consideran que la estrategia de enfrentamiento contra grupos delictivos en nuestro país no ha tenido los resultados ideales.
#Exclusivo | Merrick Garland asume como procurador con ideas diferentes a las de Barr. El rol de Lisa Monaco y sus contactos en México.https://t.co/hM5XOomLWq pic.twitter.com/Y5vvOdQFKD
— La Política Online México (@LPOmx) January 20, 2021
Ambos funcionarios consideran que el modelo implementado en la actualidad ha fracasado dos veces, puesto que no ha logrado detener el flujo de drogas en territorio estadounidense y ha potenciado el clima de violencia en México. El portal asegura que un colaborador de Garland habría dicho que la estrategia no puede limitarse a ‘capturar narcos famosos’.
Garland es recordado por haber sido nominado a la Corte Suprema durante la presidencia de Barack Obama. Sin embargo, su apertura a discutir la legalización de ciertas drogas le restó apoyo de los senadores republicanos, quienes bloquearon su nombramiento. Monaco, por su parte, fue una de las funcionarias afectadas por el escándalo de la Operación Rápido y Furioso.
El artículo finaliza afirmando que existe incertidumbre en Palacio Nacional con respecto a la estrategia promovida desde el Departamento de Justicia. No obstante, parece haber señales de que esta se enfocará en incrementar la colaboración entre ambos países, incrementando el intercambio de información y técnicas de entrenamiento.
Este movimiento llegaría en un momento crítico para las operaciones de la DEA en México, ya que tanto el presidente Andrés Manuel López Obrador como el fiscal Alejandro Gertz Manero han cuestionado la actuación de dicha agencia en nuestra nación, promoviendo leyes para regular la operación de sus efectivos.
Con información de La Política Online.
Imagen: El Día
