El secretario de Seguridad Pública de la Ciudad de México, Omar García Harfuch, negó de manera categórica los señalamientos publicados por el periódico Reforma este jueves, en los que un implicado en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa lo acusó de recibir 200 mil dólares de parte del crimen organizado.
A través de su cuenta de Twitter, el funcionario capitalino rechazó categóricamente las declaraciones emitidas por un testigo protegido identificado como ‘Juan’. En la publicación, añadió que su trayectoria en diversos niveles en el combate a la delincuencia habla por sí misma y afirmó que no tiene nada que ocultar.
Niego categóricamente las declaraciones dolosas hechas contra mi persona por un delincuente, hoy “testigo protegido”, publicadas por @reforma. Mi trayectoria en el combate a la delincuencia organizada en distintos frentes habla por si misma. No tengo nada que ocultar.
— Omar Garcia Harfuch (@OHarfuch) January 21, 2021
El día de ayer, dicho medio publicó en primera plana las declaraciones de ‘Juan’ que constan en el expediente de investigación del ‘caso Ayotzinapa’, en el que se asegura que elementos de la Policía Estatal de Guerrero y de las Fuerzas Armadas participaron activamente en el aseguramiento y desaparición de los normalistas.
En un segundo artículo derivado del mismo expediente, Reforma retomó el testimonio del delincuente, quien afirma que García Harfuch estaba en la nómina de la organización Guerreros Unidos; recibiendo hasta 200 mil dólares mensuales a cambio de facilitar información estratégica que facilitara el trasiego, transporte y venta de sustancias ilegales.
En aquel momento (año 2014), el funcionario se desempeñaba como el coordinador de Seguridad Regional de la Policía Federal en Guerrero. ‘Juan’ asegura que García estaba bien conectado con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) debido a que es nieto del general Marcelino García Barragán, director de la dependencia entre 1964 y 1970.
Otros funcionarios implicados por este testimonio son Leonardo Octavio Vázquez Pérez e Iñaki Blanco Cabrera, quienes se desempeñaban como secretario de Seguridad Pública y fiscal general, respectivamente, y que recibían –según ‘Juan’- 50 mil pesos mensuales. También se asegura que había un general que recibió hasta 5 millones de pesos.
Reforma pretendió presentar la información relativa a este expediente como una primicia; sin embargo, la información ya se había hecho pública desde el pasado mes de julio, cuando el periodista Álvaro Delgado publicó los detalles de dicha carpeta en un reportaje publicado por el semanario Proceso.
https://twitter.com/TheMexicoNews1/status/1351946525765677056
Ahí también se informó sobre la participación de la Policía Estatal y los 27 y 41 Batallones de Infantería, quienes habrían retenido a los jóvenes en sus cuarteles antes de asesinarlos y desaparecer sus restos. Los primeros los habrían entregado a una célula de Guerreros Unidos para disolverlos en ácido, mientras que los segundos hicieron uso de una funeraria para cremar los cuerpos.
El operativo, cuyo objetivo sería la captura de un grupo de sicarios del cártel de Onésimo Marquina Chapa que se confundieron entre los estudiantes, habría estado a cargo de Jesús Pérez Lagunas, mejor conocido como ‘El Güero Mugres’, mismo personaje encargado de realizar los pagos de sobornos a las autoridades.
Esta no es la primera ocasión en la que Omar García Harfuch es acusado de haber mantenido vínculos con grupos criminales tras su paso por la Policía Federal, ya que la periodista Anabel Hernández asegura que el secretario falló las pruebas de polígrafo hasta en tres ocasiones.
Con información de Reforma.
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