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Los crímenes Felipe Calderón, la FGR no actúa

En la opinión de Elí González
@calacuayoMX

En medio de tantas evidencias de la delincuencia y crímenes de Felipe Calderón Hinojosa (FCH) y la lentitud con la que se está viendo la Fiscalía General de la República, vamos a hacerle una semblanza de lo que los mexicanos no queremos que se olvide.

Felipe Calderón llevó a México a una guerra contra los cárteles sin una estrategia de por medio, más que la protección de su grupo delincuencial, en contra de los enemigos de su grupo y olvidó a sus gobernados (nosotros).

Esa guerra cobró cientos de miles de vidas y decenas de miles de desapariciones.

Diversas voces y plumas aseguraron desde entonces, que FCH conocía los vínculos de Genaro García Luna con el crimen organizado. Incluso, hubo señalamientos directos en su contra. Hoy es evidente que el mismo Calderón era su jefe en el gobierno y en la delincuencia.

El narcotraficante Édgar Valdez Villarreal, “La Barbie”, a través de una carta que envió al diario Reforma en el año 2012, acusó a Felipe Calderón y a Genaro García Luna, de tener vínculos y recibir dinero del narcotráfico; que el mismo FCH, tuvo reuniones con Heriberto Lazcano, Miguel Ángel Treviño, Arturo Beltrán Leyva y El Chapo Guzmán.

Valdez Villarreal era un joven listo y supo relacionarse con los carteles y con el gobierno. Fue detenido el 30 de agosto de 2010, y cinco años después extraditado a Estados Unidos, acusado de haber introducido 12 toneladas de cocaína las ciudades de Memphis y Atlanta en dos años.

Através de investigaciones periodísticas, Felipe Calderón siguió siendo acusado sin que el Poder Judicial mexicano, ni la PGR de Peña Nieto lo tocaran.

Su suerte empezó a cambiar cuando, en EEUU, en Juicio de “El Chapo”, se empezó a destapar su cloaca.

Jesús “El Rey” Zambada, hermano de Ismael “El Mayo” Zambada, confesó haber entregado tres millones de dólares a funcionarios del gobierno de Fox, a través de Genaro García Luna y a partir de ahí, los sobornos fueron constantes en el gobierno de Felipe Calderón.

El narcotráficante Sergio Villarreal Barragán “El Grande”, lugarteniente de los hermanos Beltrán Leyva, quien fue detenido y extraditado a EEUU en 2010, confesó los vínculos de su cartel con el gobierno de Calderón, por medio del excomandante de la Policía Federal, Iván Reyes Arzate, arrestado también por Estados Unidos en abril de 2017.

Anabel Hernández, quien ha documentado los delitos de García Luna, tuvo acceso a las declaraciones de “El Grande”.

En sus declaraciones revela García Luna y su “compadre” Luis Cárdenas Palomino, colaboraban para el Cártel de Sinaloa y los Beltrán Leyva cuando laboraban en la Secretaría de Seguridad Pública Federal de Felipe Calderón.

Vicente Zambada Niebla “El Vicentillo” hijo de “El Mayo”, le reveló a Anabel Hernandez la forma en la que operaba la Policía Federal.

Genaro García Luna recibió millones de dólares del Cártel de Sinaloa y colocó a los policías federales al servicio de “El Mayo” y “El Chapo”. Pero también comenzaron a comprarle, convirtiéndose así la PF de Calderón en traficantes de droga.

Felipe Calderón carga también el caso “Rápido y Furioso”, operativo de 2006 a 2011, cuando agentes de la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF) de EEUU introdujeron a México más de 2,500 armas de alto poder con la finalidad de rastrearlas e identificar a los responsables del tráfico de armamento que posteriormente irían a dar a manos de narcotraficantes y utilizadas para matar a cientos de miles de mexicanos.

El 8 del presente mes de mayo, Dolia Estévez reveló que Eduardo Medina Mora, exprocurador de Felipe Calderón, autorizó y coordinó el trasiego de las armas de fuego del operativo rápido y furioso.

Si como apunta la evidencia, el gobierno mexicano a cargo de Felipe Calderón participó, habría incurrido en graves violaciones a la Constitución.

Si las autoridades estadounidenses actuaron sin autorización en territorio mexicano, habrían violado la soberanía nacional, bajo la responsabilidad, también, de Felipe Calderón.

El martes pasado, Lydia Cacho expuso el documento del “Plan Mérida para México y América Central: Financiamiento y Cuestiones Políticas” en el cual queda explicitado que el gobierno de Calderón tenía conocimiento del traslado ilegal de armas entre Estados Unidos y México, del Congressional Research Service (2009).

El documento oficial evidencia por qué y para qué Felipe Calderón pidió dinero para traer armas que cayeron en manos del narco y asesinaron a miles de inocentes.

Por estos hechos, la fiscalía de Alejandro Gertz Maneros debería abrir una investigación formal en contra de Felipe Calderón, independientemente de lo que se estará llevando en Estados Unidos de America.

¿Hasta cuando se hará justicia?

Imagen: Forbes México

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