El gobierno del Reino Unido aprobó la extradición del periodista Julian Assange a Estados Unidos, país en el que enfrenta diecisiete cargos criminales por la filtración de millones de documentos clasificados sobre las intervenciones militares de dicho país en Irak y Afganistán.
El Ministerio del Interior -encabezado por Priti Patel, quien también ha enfrentado la presión pública por la deportación de refugiados de Rwanda- tomó la decisión de entregar al fundador de WikiLeaks a las autoridades estadounidenses, pues consideran que los derechos fundamentales de este no corren riesgo si es encarcelado en la Unión Americana.
Al firmar el documento de extradición, Patel señaló que no encontraron que el proceso que Assange enfrenta en Estados Unidos sea injusto u opresiva y que existen garantías para considerar que el australiano no corre riesgo en el sistema penitenciario norteamericano, así como la promesa de que no enfrentará pena de muerte.
El gobierno de Reino Unido aprobó este viernes 17 de junio la extradición del fundador de @wikileaks, #JulianAssange, a Estados Unidos, en donde será juzgado por los delitos de espionaje, enfrentándose a una condena de hasta 175 años en prisión. pic.twitter.com/ZWc2ISRYk4
— SPR Informa (@SPRInforma) June 17, 2022
Tras el anuncio realizado por el gobierno británico, el representante legal de Assange, Baltazar Garzón, informó que la defensa aún no ha sido notificada oficialmente sobre la resolución. WikiLeaks, por su parte, calificó este como un ‘día negro’ para la democracia y la libertad de expresión y afirmó que se apelará dicha decisión.
Las autoridades de Estados Unidos acusan a Assange de hasta diecisiete violaciones a la Ley de Espionaje de 1917 por haber difundido millones de documentos que demuestran las violaciones a los derechos humanos cometidas por este país durante las invasiones a países de Medio Oriente durante las administraciones Bush y Obama.
La persecución judicial contra Julian Assange comenzó en 2010, cuando la justicia de Suecia inició un proceso en su contra por dos acusaciones de abuso sexual. Desde entonces se consideró que se trataba de una estrategia para extraditarlo a Estados Unidos. Las investigaciones se cerraron en 2019, por falta de pruebas contundentes.
El gobierno de Rafael Correa le otorgó asilo diplomático en la Embajada de Ecuador en Londres, en donde vivió de 2012 a 2019. Sin embargo, Lenin Moreno le retiró la protección, siendo arrestado y recluido en la prisión de Bellmarsh desde entonces.
Con información de Proceso.
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