Una investigación de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) detectó varias irregularidades en la Cuenta Pública de 2018 –último año de gobierno de Enrique Peña Nieto- en diversas instituciones del sector salud, cuyo daño al erario podría ascender hasta los 5 mil 761 millones de pesos.
Entre las anomalías detectadas por la ASF se encuentran la entrega irregular de medicamentos, incumplimiento en la entrega de monederos electrónicos, sobrecostos en obras y opacidad en contrataciones, las cuales se dieron en instancias como el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado (ISSSTE) y el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratoria.
Hallan en sector salud anomalías por 5 mil mdp de la cuenta pública 2018: ASF – https://t.co/uvp3AAbUbJ pic.twitter.com/zye6Kx1MNA
— Proyecto Puente (@ProyectoPuente) February 22, 2020
El ISSSTE utilizó recursos del presupuesto de 2018 para pagar la adquisición de monederos electrónicos por 420 millones de pesos; sin embargo, estos no fueron entregados en tiempo y forma, lo cual generó un gasto adicional por 9.4 millones. A pesar de estas fallas, la institución no revisó los términos del contrato con la empresa proveedora, el cual tiene un valor de mil 80 millones de pesos.
El INER presentó irregularidades en la salida de medicamentos y sobrecostos en la adjudicación de obras. El primer señalamiento refleja una pérdida de 1.8 millones de pesos en la salida de sulfato de morfina y citrato de fentanilo, opioides utilizados para cuidados paliativos la cual se logró a través de la alteración y falsificación de mil 730 recetas.
Además, el Instituto otorgó dos contratos para la realización de obras de infraestructura cuando había opciones menos costosas. Se pagó por una adaptación para el almacén de víveres por 10.6 millones de pesos cuando había una propuesta por 8.2 millones; así como por la construcción de una barda perimetral por 2.1 millones de pesos a pesar de existir una opción de 1 millón de pesos.
Finalmente, el IMSS no pudo explicar la contratación de bienes del ejercicio 2018, la cual tuvo un costo de 4 mil 23 millones de pesos debido a que la institución no cuenta con un sistema que permita realizar un registro, control y seguimiento en los contratos y pedidos realizados.
Con información de Vanguardia.
Imagen: ESPECIAL
