Hunter Biden, hijo del presidente de Estados Unidos, se declarará culpable de dos cargos de evasión fiscal para evitar un proceso penal por portación ilegal de armas, investigación que data desde la administración de Donald Trump.
Christopher Clark, representante legal del abogado de 53 años de edad, anunció que su cliente alcanzó un acuerdo con el fiscal general para el distrito de Delaware, David Weiss, para concluir las investigaciones que este último -nombrado por la administración anterior- condujo durante los últimos cinco años.
Biden aceptará su culpabilidad por no presentar en tiempo y forma sus declaraciones fiscales de 2017 y 2018, cuando fungía como cabildero de diversas empresas internacionales con intereses en Europa Oriental y Asia Menor, pues recibió pagos aunque no se registró oficialmente como representante de estas.
A cambio, Weiss y el Departamento de Justicia retirarán la acusación de portación ilegal de un arma de fuego que el señalado adquirió en 2018, cuando enfrentaba un grave problema de adicción al alcohol y a diversas drogas.
Finalmente, la Fiscalía de Delaware recomendará que Hunter Biden enfrente un proceso de libertad condicional por los dos cargos de evasión fiscal; mientras que, por la posesión ilegal de armas, el señalado se comprometerá a no consumir drogas durante los dos años siguientes a la firma del acuerdo y no volver a adquirir armamento.
Tras la reunión con los fiscales, Clark declaró que su cliente sabe que ‘es importante asumir las consecuencias de los errores cometidos durante un periodo de confusión y adicciones en su vida’, motivo por el cual aceptó reconocer todos los cargos imputados en su contra.
Con información de Proceso.
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