Un reportaje periodístico y un estudio científico publicados en semanas recientes revelaron una situación alarmante en varias ciudades fronterizas del país: ya hay farmacias que venden medicina adulterada con fentanilo.
El pasado 3 de febrero, el periódico Los Ángeles Times publicó un artículo elaborado por los periodistas Keri Blakinger y Connor Sheets, en el que descubrieron que varios de los productos que pequeñas farmacias de Tijuana, Cabo San Lucas y San José del Cabo venden como legales en realidad tienen opioides y otras sustancias adictivas.
Los investigadores preguntárselo por medicamentos para el dolor que en Estados Unidos requieren receta médica, como Oxicodona, Percocet o Aderall, descubriendo que pastillas anunciadas como la primera sustancia en realidad contienen fentanilo, opioide sintético 100 veces más poderoso que la morfina.
Sin embargo, no fue la única sustancia, pues también encontraron rastros de metanfetamina en un supuesto Aderall. Los resultados obtenidos en las farmacias de Tijuana mostraron similitud con los de los puertos turísticos de Baja California Sur, en donde también hallaron muestras de ambas sustancias.
Unos meses antes, la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) realizó un estudio similar en cuatro ciudades fronterizas no mencionadas, en donde prácticamente dos de cada tres pastillas analizadas contenían rastros de medicamentos más poderosos.
Si bien la situación de muerte por sobredosis de fentanilo en México no es tan dramática como en Estados Unidos -en donde registran más de 100 mil fallecimientos anuales- el hallazgo de estos estudios podría indicar que el riesgo de una crisis similar no esté tan lejos.
Con información de Sin Embargo.
Imagen:
