Por primera vez en la relación petrolera de ambos países, México comprará crudo a EEUU. Se estima que unos 350.000 barriles de petróleo liviano serán parte de una prueba para alimentar sus refinerías.
Al decir de especialistas, este convenio puede significar un hito en la industria; además pone en evidencia la consolidación de Estados Unidos, el eterno gran consumidor, como país productor.
Según información proporcionada por SinEmbargoMx, Pemex planea usar el crudo importado en su refinería en Salina Cruz, con capacidad para procesar 330.000 barriles por día, según dijo la semana pasada a Reuters el director general de la empresa.
Es importante recordar que desde 2015, Pemex había considerado un intercambio de crudo con Estados Unidos que le permitiera importar petróleo más ligero mientras exporta su crudo emblemático Maya. Pero la empresa ha elegido comprar crudo estadounidense en el mercado abierto, importaciones que se planean hasta fin de noviembre, cuando finaliza el actual gobierno.
Por su parte, el máximo responsable de la petrolera mexicana, Carlos Treviño, reveló planes a principios de la semana pasada para importar 100 mil barriles al día de crudo ligero en octubre para que la refinería de Salina Cruz compense la producción en declive del yacimiento de petróleo Xanab, que no extrajo un solo barril de petróleo en julio y agosto.
“Pemex importará Light Louisiana Sweet a modo de prueba y, dependiendo del desempeño en sus refinerías, podría solicitar despachos en noviembre, según una fuente cercana al tema”, destacó el Financiero Bloomberg.
Es importante recordar que durante el pasado agosto, la producción de petróleo en México sufrió una disminución del 25%, a 1.82 millones de barriles diarios, desde que la reforma energética se aprobó con la finalidad de acabar con el monopolio energético estatal y atraer inversiones extranjeras.
