Un exintegrante de la Marina Armada de México demandó a dicha institución por haber sido despedido injustificadamente, después de denunciar a oficiales de mayor rango por organizar fiestas en plena contingencia sanitaria por COVID-19.
Jorge de Jesús Rivera Salvador, cabo adscrito al Servicio de Administración de Intendencia Naval -en donde se desempeñaba como chofer- fue detenido el 26 de junio de 2021 en Puerto Peñasco, Sonora.
Oficialmente, el marino fue detenido por no haber acatado las medidas sanitarias correspondientes y, posteriormente, acusado de haber intentado sobornar a algunos de sus superiores. Él, por su parte, señala que se trata de una represalia por denunciar a tres oficiales de mayor rango.
Se trata del teniente de corbeta Juan David Ruan Casas, al contramaestre Raúl Ponce Farfán y al capitán Francisco de la Paz Molina, comandante de la Guardia Nacional en Puerto Peñasco; a quienes señaló en una denuncia enviada el 1 de enero de 2022, a la que la Secretaría de Marina jamás dio respuesta.
Rivera refiere que, en el momento de su detención, se encontraba acompañado del maestre condestable Ramón Moreno Lora en el corralón de Puerto Peñasco, lugar en el que los señalados hacían sus reuniones clandestinas, cuando fue emboscado y detenido por no portar cubrebocas en aquel momento.
También señaló que no fue el único sancionado, pues otros dos marinos que respaldaron su denuncia también fueron dados de baja del servicio activo. A estos se les separó bajo el argumento de que no habían acatado el reglamento militar.
Jorge de Jesús ingresó a la Marina en 2011, desempeñando durante todo su servicio el cargo de chófer en distintas instancias, como el Cuartel General del Alto Mando, en la Ciudad de México. Durante ese periodo recibió una condecoración por diez años al interior de las Fuerzas Armadas.
Además del despido injustificado, también señala a la Semar por haberle retirado la cobertura médica pese a que un juez de Sonora le otorgó un amparo para que mantenga sus prestaciones mientras se resuelve el proceso, pues el Hospital Naval se niega a atender a su madre, exigiendo una copia de la resolución.
Con información de Pie de Página.
Imagen: El Financiero
