Este domingo, en el Zócalo capitalino, culmino la ‘Caminata por la Paz’, convocada por el poeta y activista Javier Sicilia, así como por representantes de la familia LeBarón; quienes exigían un cambio en la estrategia de seguridad por parte de la actual administración. Sin embargo, al llegar a Palacio Nacional se rehusaron a reunirse con integrantes del gabinete para exponer sus propuestas.
“No tenemos nada que hablar con el gabinete de seguridad, redujeron el asunto nuestro a un asunto de balas, más que a una política de balas, en lugar de una política de Estado. Ningún miembro de la familia LeBarón, ni yo, vamos a entrar a Palacio” fueron las palabras que el poeta leyó frente a la multitud que los acompañó desde Cuernavaca.
Posteriormente, una persona fue delegada para entregar el documento ante la directora de la Unidad de Atención Ciudadana, Leticia Ramírez; a pesar de que, al interior de Palacio Nacional, una comitiva encabezada por los secretarios de Gobernación y Seguridad Ciudadana –Olga Sánchez Cordero y Alfonso Durazo, respectivamente- ya esperaba a los representantes de la marcha.
Los activistas que encabezaron la #MarchaPorLaPaz decidieron no reunirse con el Gabinete de Seguridad de AMLOhttps://t.co/auJ1bUCkAe
— Reporte Índigo (@Reporte_Indigo) January 27, 2020
Durante su comparecencia, Sicilia afirmó que instruyó que la carta se entregara de manera directa al presidente Andrés Manuel López Obrador; a quien no atribuyó la responsabilidad por la ola de violencia que ha azotado a nuestro país desde el sexenio de Felipe Calderón; sin embargo, sí lo acusó de haber dado la espalda a la agenda de paz y justicia, de continuar con los ‘megaproyectos’ y de utilizar un lenguaje que ‘divide’ a la nación.
La jornada final de la marcha arrancó en la Estela de Luz, ubicada junto a la entrada del Bosque de Chapultepec, justo donde comienza el Paseo de la Reforma. A su paso por dicha vialidad, algunos integrantes de la marcha se aproximaron a representantes de los partidos de oposición (PRI, PAN, PRD, MC), quienes los esperaron en las inmediaciones del Senado de la República.
Cuando el contingente alcanzó la plancha del Zócalo capitalino, fueron recibidos por seguidores de Morena y López Obrador, quienes cantaron consignas en contra de la marcha, lo cual derivó en algunos connatos de bronca, en los que se registraron empujones e intercambios de palabras. Finalmente, se pidió que no se cayera en provocaciones y tomaron la Plaza de la Constitución con el puño en alto.
Con información de La Jornada y Diario de Yucatán.
Imagen: ESPECIAL
