Pese a que sus posturas respecto a temas como el aborto coinciden, la diputada panista María Teresa Castell de Oro cuestionó las intenciones del actor conservador Eduardo Verástegui de registrarse como candidato independiente a la Presidencia.
A través de su cuenta de Twitter, la legisladora mexiquense -aunque nacida en Monterrey- compartió una caricatura que el monero Jerge publicó en La Jornada, en la que el protagonista de Alma Rebelde aparece disfrazado de Jesucristo en la cruz, pero en realidad es una marioneta controlada por el Partido Republicano de Estados Unidos.
En la publicación, Castell asegura que la candidatura de Verástegui es un ‘circo’, detrás del cuál estarían el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador como por el exmandatario estadounidense Donald Trump, de cuya agenda ultraconservadora el intérprete se declara un furibundo seguidor.
La postura de Castell llama la atención porque, al igual que Eduardo Verástegui, tiene una postura muy clara en contra de la despenalización y legalización del aborto, misma que impulsó como uno de los ejes de su campaña independiente -otra coincidencia entre ambos- al gobierno del Estado de México en 2017.
Durante su encargo como legisladora, la representante del Distrito 34 mexiquense (Toluca) también protagonizó numerosas polémicas por sus ataques contra grupos de la diversidad sexual, ejerciendo violencia política de género contra las diputadas trans María Clemente García y Salma Luévano.
A la par de su carrera artística, Eduardo Verástegui es una de las figuras emergentes en el renacimiento de la extrema derecha en México, encabezando la organización católica Viva México y presidiendo la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC), organización vinculada al Partido Republicano.
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