Este lunes, la agencia de noticias Reuters publicó un artículo en el que dio a conocer que hubo una reunión de representantes diplomáticos de diversos países en la Ciudad de México, quienes presuntamente estarían preocupados por la agenda que el presidente Andrés Manuel López Obrador mantiene en materia energética.
De acuerdo con dicha nota, los representantes de Canadá, España, Alemania, Francia, Gran Bretaña, Italia y Países Bajos se habrían reunido en las instalaciones de la Embajada de Estados Unidos en la capital de nuestro país para mostrar su preocupación. El encabezado de la pieza fue reproducido de tal forma que da a entender una auténtica alarma por dichas políticas.
Sin embargo, la verdadera razón por la cual se reunieron los diplomáticos de todas estas naciones –tal como afirma el contenido del artículo- es por la preocupación que tienen las empresas privadas de sus respectivos países, que quieren que se mantengan los beneficios que les otorgan los contratos firmados con las administraciones anteriores en materia energética.
EXCLUSIVE: The United States, the European Union, Canada and six European nations meet to discuss concern over Mexico energy policy, as President Andres Manuel Lopez Obrador pushes for a bigger role for the state in the sector https://t.co/eogZ4XYj4I pic.twitter.com/217i2I5a6a
— Reuters (@Reuters) March 9, 2020
A estas compañías –y a los gobiernos de sus respectivos países- les preocupa que el enfoque de López Obrador, centrado en el rescate de Petróleos Mexicanos (Pemex) a través de la intervención del Estado, debilite y deje sin efecto los acuerdos de miles de millones de dólares firmados durante el periodo de Enrique Peña Nieto.
Otra de las preocupaciones de los poderes extranjeros es que varias de estas compañías depositan parte de las ganancias generadas a costa de los recursos naturales de México en fondos de pensiones, tanto en Europa como en Estados Unidos; por lo que la política energética del tabasqueño podría afectar los ingresos de cientos de jubilados en dichos países.
Estas empresas fueron motivadas a invertir en el sector energético mexicano gracias a las modificaciones constitucionales que el expresidente Peña Nieto realizó para llevar a cabo la Reforma Energética. Sin embargo, los beneficios de la liberalización de los hidrocarburos no se reflejó en beneficios para los mexicanos, por lo que López Obrador decidió detener estas acciones.
Reuters asegura que sus fuentes anónimas al interior de dicha reunión discutieron sobre la posibilidad de hacer público el encuentro, así como informar al mandatario sobre sus preocupaciones; sin embargo, decidieron no hacerlo por temor a provocar una reacción negativa de su parte, endureciendo su política energética.
Finalmente, ninguna de las delegaciones confirmó de manera oficial la junta que se llevó a cabo en Paseo de la Reforma. La Embajada de Estados Unidos se negó a hablar sobre el contenido de sus encuentros, mientras que ninguna de las otras representaciones emitió declaración alguna respecto al tema.
Con información de Reuters y Proceso.
Imagen: ESPECIAL