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Descubre los momentos más importantes del último debate entre Donald Trump y Joe Biden

Este jueves se celebró el segundo y último debate presidencial entre los dos candidatos que aspiran a gobernar Estados Unidos durante los próximos cuatro años: el senador demócrata Joe Biden y el republicano Donald J. Trump, quien busca ser reelegido para un segundo periodo.

El encuentro entre ambos candidatos se celebró en las instalaciones de la Universidad Belmont, ubicada en Nashville, Tennessee, y fue moderado por Kristin Walker, corresponsal de la cadena NBC en la Casa Blanca, a quien el mandatario atacó antes del evento, afirmando que sería parcial hacia su oponente.

Sin embargo, el propio Trump felicitó a la periodista por su labor en pleno debate. En general, el enfrentamiento entre ambos contendientes resultó ser mucho más civilizado que el ocurrido en septiembre, en donde el demócrata se dedicó a interrumpir a Biden, lo cual motivó que, en esta ocasión, se silenciaran los micrófonos de los contendientes durante las participaciones.

El encuentro se centró en seis temas principales: liderazgo, seguridad nacional, la lucha contra el COVID-19, el racismo, las familias estadounidenses y cambio climático. Durante sus participaciones, ambos adversarios expusieron dos visiones diametralmente opuestas de nación y no perdieron oportunidad para realizar feroces ataques personales.

La estrategia principal de Donald Trump pasó por encasillar al legislador como un político de carrera, que se ha valido de su cargo para beneficiar económicamente a su familia y que no ha hecho nada significativo por el país. Uno de los principales ataques pasó por denunciar la presunta colusión entre la familia Biden y China.

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El ex vicepresidente estaba preparado para ese tipo de señalamientos y respondió acusando al presidente de no solo hacer negocios en el país asiático, sino de mantener cuentas bancarias allí. Este último reconoció que estas si existían, pero que fueron cerradas en 2015, antes de anunciar sus intenciones de llegar a la Casa Blanca.

Uno de los temas más polémicos fue el manejo de la pandemia. Trump afirmó que su combate al virus ha sido ‘ejemplar’, que lo mejor está por venir y que logró reducir a 200 mil fallecimientos unas proyecciones iniciales de más de 2 millones. Biden, por su parte, denunció la inefectividad del gobierno federal, con una tasa de 70 mil contagios diarios y una nula capacidad de reacción.

Otros dos temas delicados de cara a los comicios del 3 de noviembre son el racismo y la inmigración. Pese a la gran cantidad de protestas contra la discriminación que se han dado en los últimos meses, las cuales fueron condenadas por el propio Trump, este asegura que, con la posible excepción de Abraham Lincoln, ningún presidente ha hecho más por la comunidad afroamericana que él.

También afirmó que quisiera reunir a los niños migrantes con sus familias, pero dio a entender que no lo hace porque cree que estos son enviados por los cárteles y declaró que las instalaciones en las que son detenidos son limpias y cómodas, lo cual ya ha sido comprobado como falso.

Biden respondió asegurando que Trump y su equipo han preferido ignorar el racismo sistémico que existe en Estados Unidos y calificó como ‘criminal’ que las autoridades migratorias hayan separado a cientos de familias, situación que debe ser corregida.

La mayoría de los especialistas considera que esta fue una contienda igualada; sin embargo, hacia el final de la misma, Joe Biden cometió un error estratégico que podría tener consecuencias en ‘estados bisagra’ que podrían definir el rumbo de la elección.

Durante el cierre, Trump aseguró que, durante las horas siguientes, publicaría un video de su adversario, quien –sorprendentemente- lo retó a compartirlo en ese momento. En la grabación, el senador afirmaba repetidamente que terminaría con los combustibles fósiles, lo cual dio pie a que el republicano lo acusara de intentar acabar con la industria petrolera.

Esto podría tener un impacto negativo para Biden en estados clave como Texas, en donde las encuestas lo colocan muy cerca de su rival; así como en Pensilvania y Ohio, dos estados que dependen de la extracción de hidrocarburos y que suelen ser determinantes en los comicios presidenciales y en los que, hasta ahora, lleva ventaja.

Con información de BBC Mundo, Infobae y Marca.

Imagen: Meganoticias

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