Me gusta el sarcasmo en una justa medida, siempre he dicho que el sarcasmo en sí mismo encierra una queja, la mejor manera de decir, ¡se los dije!
La política va junto con pegado a los partidos políticos, al menos en México. Muchas veces es un asqueo ver desde afuera tantas tranzas que hacen pero que se vuelve un secreto a voces, algunos callan porque forman parte de la tranza o temen ser bloqueados y en el peor de los casos ser despedidos, si es que trabajan para el partido político.
Platicando con amigos y conocidos de diferentes partidos políticos, llegamos a varias conclusiones que son comunes.
Yo soy de las personas que valoran más la amistad que la filiación partidista, por esa razón enumerare algunos pasos y/o forma de conducirse para llevar casi a la quiebra un partido político.
Contrata puros recomendados.
Si llegas a ser secretario de alguna rama del partido, no importa tanto la rama, si no lo que puedas ganar; claro está en lo económico, no se te olvide llenar tu área con personas flojas y recomendadas; que lo único que hacen es ir a pasar lista para cobrar cada quincena. Ni se te ocurra ni en el más remoto de las ideas contratar personas capacitadas y preparadas en una de esas te pueden quitar la chamba.
Que tu hijo o hija trabaje contigo, el nepotismo primero.
Si tú ya eres secretario del partido político, lo primero que debes hacer es meter a tu hijo o hija a trabajar, no lo dejes en el desempleo, haz brillar el nepotismo, niégales la oportunidad a los jóvenes que llevan años esperando una oportunidad. No es necesario que digas que tu hijo trabaja contigo, la gente solo se va dar cuenta, lo más importante en todo, procura que gane igual que tú, sería una lástima que cobrara como un pasante, te daría mucha vergüenza si tuviera un salario malísimo.
Brinca de puesto en puesto de regidor a diputado y viceversa.
Si ya llevas años viviendo del partido político; ya metiste a tus hijos y conocidos, por circunstancia de la vida se te da un hueso como regidor o como diputado sin ser votado, es decir entrar de manera proporcional, aférrate a ese puesto, no importa la edad, aunque ya estés por jubilarte, tu aprovecha. Y eso sí, antes de acabar tu periodo busca que los demás te vuelvan a dar otro puesto, si ya estuviste de regidor pues ahora te toca de diputado, y así las veces que sean necesario, procura que nadie ocupe ese lugar, porque solo es tuyo.
Las candidaturas solo son para familiares y amigos.
Este punto va muy relacionado con el anterior, en el momento que se definan las candidaturas, no permitas que nadie más sea candidato, al menos que sea tu esposa, tu esposo, tus hijos, tus amigos y hasta amante, porque solo ellos merecen estar, ¿y si no les gusta la política? eso es lo de menos, nadie nace sabiendo, es más hasta pueden aprender en el momento que ya tengan el puesto, que flojera prepararlos con anticipación si es que no les va tocar huesos. Ten mucho en cuenta que nadie fuera de tu circulo le toque candidaturas, sería muy feo que otros sean candidatos y más si es alguien que lleva militando más de 10 años y en cada elección pide una oportunidad para ser tomado en cuenta.
Como presidente de partido promete y sé el primero en todo, por ejemplo, ser el primer diputado.
Si tú eres el presidente del partido, promete, promete todo lo que puedas, que al cabo prometer no empobrece, no se te olvide que en cada elección tú debes ser el primero en la lista para ser diputado, no hagas caso a los que si se merecen ese puesto, haz como que trabajas por el partido, negocia las posiciones, dile si a todos. Pero a la mera hora tú ya sabes quienes son tus consentidos. Recuerda que ser presidente de partido es cansado por eso mereces ser diputado después de cada elección, que no te de vergüenza. Si no eres tú, alguien más será, así que aprovecha.
Presume siempre tu puesto político, aunque sea pichurriento.
Lo más importante, ante todo, aunque ocupes el puesto más pichurriento, presumelo siempre, has gala de ese puesto, porque sin ti muchos políticos no podrán hacer sus actividades. Cuando te enteres que alguien conocido va de candidato y si es para presidente municipal, empieza a presionarlo para que te de un puesto de regiduría, por redes sociales o por terceros, hazlo, porque es la única manera que conoces. Muchas veces funciona así que inténtalo.
Estos son algunos pasos que se pueden seguir para llevar casi a la extinción un partido político.
En estos días los partidos políticos son cotos de poder familiar, los militantes son los que menos importan, mientras las élites tengan el poder, siempre se van aprovechar de las administraciones.
En estos días muchos partidos se han debilitados por llevar a cabo algunos puntos ya mencionados, pero si siguen por ese paso, irán seguro a la desaparición porque dejaron de tener credibilidad después de muchos años de estar haciendo lo mismo. Los vicios de unos pocos llevan a la ruina a la mayoría, es una triste realidad. No podrán quejarse después, lo que en su momento no supieron hacer bien.
Columna de opinión propiedad de Fernando Rojas
Fotografía vía YouTube
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