Morena frena privilegios en la Cámara alta
En días pasados distintos medios de comunicación dieron a conocer que cada uno de los 128 nuevos senadores tendría una bolsa de 392 mil pesos destinados a la compra de auto y computadora, se trataba de una partida de un poco más 50 millones de pesos. Sin embargo, el presidente de la Mesa Directiva en el Senado de la República, Martí Batres, ordenó cancelar la prebenda.
Asimismo, Batres anunció que se eliminará el 42 por ciento al ingreso real de cada legislador, los seguros de gastos médicos mayores y de retiro individualizado, el complemento de aguinaldo y otras prebendas que recibían los integrantes de pasadas legislaturas. El programa de austeridad fue presentado en el transcurso de esta semana ante la Junta de Coordinación Política (Jucopo), y se aprobó por unanimidad el acuerdo que establece medidas y criterios de austeridad presupuestal para el 2019. Dicho acuerdo contempla la reducción del 30 por ciento del presupuesto de la Cámara alta, que este año fue de 4 mil 955 millones de pesos, eso significa un ahorro de alrededor de 1,500 millones de pesos.
Por su parte, el presidente de la Junta de la Jucopo en el Senado, Ricardo Monreal, adelantó que en los próximos días se subastará entre los trabajadores de la Cámara la flotilla de 170 vehículos que estaban a disposición de los legisladores; a fin de ahorrar en gasolina, seguros y mantenimiento. Monreal advirtió a los senadores que integran la LXVI Legislatura, que en lo sucesivo sus traslados tendrán que correr por su cuenta y que el Congreso dejará de ser una casa de privilegios, con la intención de estar más cerca de la ciudadanía.
Para generar el ahorro programado, el grupo parlamentario de Morena también acordó impulsar la desaparición de 22 comisiones legislativas ordinarias.
“¡Ay de aquel que se atreva a tomar un peso público!”
En lo que respecta a la Cámara baja, el legislador federal de Morena responsable de la agenda legislativa, Alfonso Ramírez Cuellar, sostiene que en el primer periodo de sesiones se intentará modificar la Ley Orgánica del Congreso, a fin de eliminar las comisiones especiales; se cancelarán también los privilegios como gastos médicos mayores, vales de comida, autos para los diputados y se reducirá la dieta.
Las 56 comisiones legislativas actuales se mantendrán, con el único propósito de adecuarlas al proyecto de nación, por lo que cambiarán de nombre y se compactarán. Se reducirá el número de asesores en lo que se erogaba 147 millones 22 mil pesos: el PRI tenía 120, PAN 45, Morena 39, PVEM 27, MC 26, PRD 23, Panal 13, y PES 12. Ahora cada dirección y grupo parlamentario sólo tendrá derecho a tres de ellos. Ramírez Cuellar también detalla que ya no habrá plazas de trabajo para las bancadas: el PRI en la pasada legislatura contaba con mil 325 plazas, el PAN 287, el PRD 397, Morena 172, MC 117, PVEM 63, Panal 85, y el PES 21. “En San Lázaro ya no habrá distribución de cuotas, y las direcciones se asignaran por concurso”, sostiene el diputado morenista.
En la misma línea se encuentra la vicepresidenta de la Mesa Directiva, Dolores Padierna, y adelanta que los cambios que se aprobarán significan un ahorro de 600 mil millones de pesos. Suma que será reorientada para impulsar los 12 primero proyectos de Andrés Manuel López Obrador para cambiar el rostro del país: la creación de 100 universidades, canasta básica para todas las zonas en pobreza extrema, becas para jóvenes, duplicar el monto de la pensión a los adultos mayores y ampliarla a personas con discapacidad, y dotación de medicinas en todos los centros de salud.
Afirma Padierna que no sólo se trata de reorientar el gasto, sino que se prioriza frenar la corrupción impulsando las iniciativas necesarias para ello, como en el caso de la reducción de salarios de la alta burocracia, e incrementar progresivamente los sueldos de médicos, maestros, enfermeras, soldados y marinos. Además de, en coordinación con los congresos locales, llevar la justicia social a las zonas más marginadas por pobreza extrema.
“Si quitamos el corporativismo, el clientelismo, el partidismo, estos vicios de la vieja política, y empezamos una nueva ruta, una nueva política donde los servidores públicos estén al servicio del pueblo, lo lograremos. Por lo pronto, la reingeniería arrojara ahorros de 600 mil millones de pesos. “¡Ay de aquel que se atreva a tomar un peso público!”, advierte Padierna en entrevista para el semanario Proceso.
