Pescadores cooperativistas de la zona camaronera de Mazatlán y El Rosario –al sur de Sinaloa- piden que el presidente Andrés Manuel López Obrador y la administración entrante les ayuden a solventar la contaminación sufrida en su área de trabajo a causa del dragado irregular realizado por las federaciones y las autoridades.
Desde el pasado 18 de mayo, Javier Omar Luna Rojas, representante de la Cooperativa Fraternidad Pesquera, ha denunciado que el área del sistema lagunar Huizache-Caimanero –conocido por su diversidad en fauna marina y camarón- en la que se dedican a la pesca de crustáceos fue bloqueada con material proveniente de un desazolve emprendido por instancias gubernamentales y otras cooperativas.
Luna ha señalado que aquel día, encontraron que el sitio pesquero Las Carmelitas fue rellenado casi en su totalidad con lodo contaminado. La laguneta afectada es el sitio en el que los pescadores estacionan sus embarcaciones y refugian las pangas cuando hay ciclones y tormentas, por lo que no pueden acceder a la laguna principal.
Además, este lugar es el sitio natural en el cual crecen las larvas de camarón, por lo que no solo se les ha bloqueado el acceso a su área de trabajo, sino que se contaminó el hábitat natural de las especies que representan su sustento económico, por lo que su forma de vida está siendo amenazada directamente.
Al respecto, los coperativistas han denunciado que se trata de una práctica que ha sido llevada a cabo durante mucho tiempo por la Cooperativa General Álvaro Obregón de El Rosario, la cual no solo drena las marismas para evitar que las otras agrupaciones puedan pescar, sino que recurre a prácticas ilegales con la anuencia de la Comisión Nacional de Pesca (Conapesca).
Además, también han señalado que ninguno de los líderes de las federaciones de pescadores de la región levanta la voz para frenar estos abusos, ya que también están coludidos y negocian a espaldas de sus representados. Acusan que algunos de estos dirigentes ya llevan más de dieciocho años en el cargo y que se perpetúan en él gracias a la compra de votos.
En segundo lugar está la calidad de la obra que se realizó para bloquear su acceso a la laguna, pues las targinas (sic) fueron construidas de manera defectuosa, ya que simplemente son ‘muros’ de lodo que no cumplen con la altura necesaria ni con las medidas mínimas para cumplir su función y con una integridad estructural casi nula.
También han denunciado que las obras de dragado y desazolve no han seguido los estándares mínimos, ya que el material sobrante tiene que ser colocado de acuerdo al contorno de la orilla y no a través del cuerpo de agua, como sucedió en el sitio Las Carmelitas.
Encima de todo, no solo se está afectando el hábitat de las larvas de camarón –vitales para la economía local- y de decenas de especies de peces, bivalvos y aves acuáticas, sino que además se destruyeron zonas de manglares, pese a que el área es un sitio Ramsar y, por lo tanto, es un humedal protegido por convenciones internacionales.
Luna señala que, desde hace meses, ha estado en contacto con personal de la Procuraduría Federal de Protección Ambiental (Profepa) en Mazatlán para denunciar estas irregularidades; sin embargo, los funcionarios le han estado dando largas argumentando que tienen que llevar el caso a la delegación en Culiacán y ahora ya ni siquiera le responden los mensajes.
Otra de las acusaciones en el caso es que la obra de mala calidad que afecta a flora, fauna y pescadores fue financiada con recursos federales, pues forma parte de un programa de desarrollo agrario y rural que cuenta con un presupuesto de 3 mil 416 millones de pesos, de los cuales 24.5 fueron destinados solamente a los estudios de impacto ambiental del dragado.
En ese sentido, Javier Luna denuncia que los responsables de gestionar la obra –quienes probablemente se apropiaron de la mayor parte de los recursos- son los líderes de las cuatro federaciones locales de pescadores, el diputado federal Mario Osuna Medina y el legislador local Édgar González Zatarain (independiente), con la anuencia de Conapesca, Profepa y la propia Secretaría del Medio Ambiente (Semarnat).
Por todo esto, los pescadores encabezados por Luna están buscando atraer la atención de medios de comunicación en la capital del país para que estos planteen la situación al presidente Andrés Manuel López Obrador –a quien ya han enviado varios oficios- y al gobernador electo Rubén Rocha Moya, para que intervengan a su favor y sean compensados por las afectaciones.
Con información de Debate Mazatlán.
Imagen: Google Earth