Debido a los bajos costos de producción y operación, tres empresas estadounidenses que fabrican equipo médico mantienen sus centros de producción en el estado de Baja California. Sin embargo, los ventiladores y respiradores que ahí se manufacturan se venden exclusivamente a Estados Unidos e Italia, sin aportar ningún beneficio para la entidad.
Algunas de estas empresas pagan a sus empleados –mexicanos de entre 25 y 40 años de edad- un promedio de 200 pesos diarios por jornadas de ocho horas. Actualmente, debido a la demanda existente, han añadido un bono de productividad de 300 pesos para incrementar el número de insumos producidos.
Dos de las tres empresas solamente se dedican a la fabricación de piezas de ventiladores para respiración asistida, mientras que una de ellas sí produce estos aparatos en su totalidad. Además de estas tres compañías extranjeras, ubicadas en Tijuana y Mexicali, hay otras nueve que manufacturan cubrebocas y otros productos médicos.
Suspende gobierno de Baja California a empresa fabricante de ventiladores, sólo vendía a Estados Unidos #CapitalCDMX https://t.co/VVoBY8X4Nt
— CapitalCDMX (@CapitalMX_) April 10, 2020
Sin embargo, estas empresas se han negado a facilitar estos insumos a las autoridades de Baja Californa para poder enfrentar la contingencia generada por la propagación del coronavirus, debido a que ya tienen vendida su producción a Estados Unidos, Italia, Reino Unido y otras naciones afectadas por esta enfermedad.
Tras la negativa de dichas compañías, el pasado miércoles 8 de abril, el gobernador Jaime Bonilla tomó la decisión de clausurar la fábrica de Smiths Healthcare, debido a que, al no producir ningún beneficio para la entidad, no consideró que su actividad fuera indispensable para el estado de Baja California.
El mandatario estatal asegura que estas empresas fueron de las que más se opusieron al incremento del 1 por ciento del Impuesto Sobre la Nómina, a pesar de que algunas ni siquiera pagan servicios como el predial. Ante esta situación, los afectados solicitaron la intervención del embajador de Estados Unidos en México, Christopher Landau; así como la del canciller mexicano, Marcelo Ebrard.
Tras una fallida ronda de negociaciones entre Bonilla Valdés, los diplomáticos de ambos países y la empresa, debido a la renuencia de esta última a facilitar los equipos al gobierno estatal; este domingo Smiths Healthcare finalmente accedió a vender partes para armar los ventiladores al estado de Baja California.
Con información de Proceso.
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