Este jueves, un jurado en Estados Unidos acusó a Luis Cárdenas Palomino y Ramón Pequeño García, dos de los colaboradores más cercanos de Genaro García Luna, de mantener vínculos con los cárteles del narcotráfico que se suponía que estaban combatiendo.
Esta información fue dada a conocer por la periodista Ginger Thompson, reportera de ProPublica y excorresponsal del New York Times para América Latina, quien también fue la primera en reportar la detención del exsecretario de Seguridad Pública, ocurrida en Dallas, Texas, el pasado 10 de diciembre de 2019.
The indictments marked a stunning fall from grace for Ramón Pequeño García and Luis Cárdenas Palomino, who had been celebrated by U.S. officials as trusted warriors in the fight against Mexican drug cartels. /2
— Ginger Thompson (@gingerthomp1) July 30, 2020
De acuerdo con lo reportado por Thompson en su cuenta de Twitter, un gran jurado aseguró que existe evidencia que demuestra que Pequeño García y Cárdenas Palomino aceptaban sobornos por parte de grupos criminales a cambio de proveerles información estratégica y facilitar sus operaciones, razón por la cual decidió acusar a ambos.
Ambos exfuncionarios desempeñaron cargos en la Policía Federal cuando García Luna estaba a cargo de la estrategia nacional de seguridad. Según la reportera de ProPublica, Ramón Pequeño era el encargado de inspeccionar a dos unidades antinarcóticos que están vinculadas a dos ataques en territorio mexicano, en su calidad de jefe de Inteligencia de la Policía Federal (PF).
Los dos señalados comenzaron a trabajar bajo las órdenes de García Luna cuando este encabezaba la Agencia Federal de Investigación, en el sexenio de Vicente Fox. Posteriormente ambos pasaron a la PF. Como ya se mencionó arriba, Pequeño García estaba a cargo de la sección de Inteligencia; mientras que Cárdenas Palomino fue el titular de Seguridad Regional de la institución.
Actualmente, Genaro García Luna enfrenta un juicio en Estados Unidos, acusado de aceptar sobornos y facilitar las operaciones de tráfico de drogas del Cártel de Sinaloa. Este mismo día debía celebrarse una audiencia; sin embargo, la fiscalía solicitó una prórroga de 60 días para recabar más pruebas que incriminen al exsecretario.
Con información de Animal Político.
Imagen: ESPECIAL
