Luis Enrique Orozco anunció su renuncia al cargo de gobernador interino de Nuevo León, abriendo la puerta al regreso de Samuel García y terminando con la crisis política que enfrentó la entidad durante los últimos días.
Esta mañana, el vicefiscal compareció en una rueda de prensa, acompañado del diputado Mauro Guerra -presidente del Congreso local- y Arturo Salinas, titular del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), en la que informó al público sobre su decisión de hacerse a un lado y permitir el regreso del emecista.
Ahí, Orozco Suárez confirmó que García manifestó expresamente su deseo de regresar al cargo, motivo por el cual decidió dar un paso de costado para garantizar la paz y la gobernabilidad del estado, decisión que sopesó junto con los titulares de los otros dos poderes locales.
Guerra, por su parte, defendió la legitimidad de la designación del vicefiscal como gobernador interino, acusando al funcionario electo y a su gabinete de obstaculizar el ejercicio del primero a cargo del Poder Ejecutivo, pese al respaldo de instancias judiciales como la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
El panista calificó la decisión de Luis Enrique Orozco de retirarse y permitir que siga adelante la solicitud de reintegración de Samuel García como un acto de ‘profundo compromiso’ con Nuevo León y alabó su postura de actuar en favor del interés público.
De esta forma, concluye la polémica por la licencia solicitada por el integrante de Movimiento Ciudadano para buscar la candidatura presidencial, la cual alcanzó su punto más álgido el pasado 2 de diciembre, cuando este anunció su regreso en medio de una serie de amparos y resoluciones judiciales contradictorias.
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