Manifestantes en el estado de Guerrero protagonizaron un enfrentamiento con la policía antimotines y la Guardia Nacional, en el que además robaron un vehículo blindado y lo usaron para irrumpir en el Palacio de Gobierno de Chilpancingo.
Las protestas que desde hace varios días tienen en estado de sitio a la capital estatal alcanzaron un nuevo punto este lunes, cuando centenares de personas tomaron la carretera que conecta a Chilpancingo con Acapulco. Posteriormente, comenzaron a avanzar, enfrentando a 500 elementos de seguridad.
Videos que circulan en redes sociales muestran que, al verse superados en número, la Policía Estatal y la Guardia Nacional comenzaron a retroceder, mientras los manifestantes avanzaban hacia la capital, haciéndose incluso con el control de un vehículo blindado conocido como ‘rino’ o ‘mamba negra’.
Al llegar a la altura del Palacio de Gobierno -ubicado sobre una de las laterales de la autopista- los manifestantes utilizaron el vehículo para romper el cerco e ingresar al recinto. Reportes locales aseguran que todas las dependencias del gobierno estatal dejaron de funcionar, excepto la oficina de Comunicación Social.
Otras imágenes de los incidentes muestran a una decena de elementos de la Guardia Nacional bajo custodia de los manifestantes. Los elementos de seguridad muestran las huellas de la batalla, pues varios de ellos presentaban heridas en cabeza y cuerpo, así como sangrado profuso.
Ante esta situación, la gobernadora Evelyn Salgado emitió un comunicado en sus redes sociales, en el que aseguró que su secretario de Gobierno, Ludwig Reynoso, sostuvo una plática con los manifestantes para garantizar el libre paso de la ciudadanía y prometió que mantendrá su política de no represión contra estos.
Con información de Infobae.
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