Este jueves, el presidente Andrés Manuel López Obrador respondió a las acusaciones realizadas por el diputado Gerardo Fernández Noroña, del Partido del Trabajo (PT), según las cuales existió una ‘operación de Estado’ para entregar la presidencia de la Cámara de Diputados al Partido Revolucionario Instituciona (PRI).
Durante su conferencia de prensa matutina, el mandatario habló sobre los señalamientos realizados por el polémico legislador. Sobre la acusación de que se orquestó una reunión a través de Segob, mencionó que no necesita estar mandando mensajeros, ya que siempre expresa de manera abierta su pensar y su sentir.
Ayer, Fernández Noroña tomó la palabra para denunciar que, de acuerdo con un medio periodístico, hubo una reunión entre la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, y los líderes de las bancadas del PRI y de Morena, en donde se habría llegado a un acuerdo para que no se presentaran controversias constitucionales.
Aquí la respuesta que quería @fernandeznorona del Presidente @lopezobrador_
"Yo hice un señalamiento y fue publico, no necesito mandar mensajeros ni ocultar las cosas, tampoco necesito condicionar ni quitar derechos para que no me toquen"
Sigan creyendo fakes de EL UNIVERSAL. pic.twitter.com/VpWeLchj6j
— Shion (@ChicShion) September 3, 2020
López Obrador expresó que no solo sería ridículo quitar a los diputados su derecho a presentar inconformidades basadas en el texto constitucional, sino que además sería ilegal e indebido actuar de esa forma. Así, rechazó la idea de que haya existido algún tipo de condicionamiento en contra de los congresistas.
En este mismo tenor, recordó que el llamamiento a respetar la legalidad –el cual fue interpretado por Noroña como la ‘entrega’ de la Mesa Directiva al partido tricolor- fue una declaración pública y, al final de cuentas, el resultado final se dio con apego a los reglamentos existentes.
Después de que López Obrador hiciera un llamado a respetar que la tercera fuerza en las elecciones fuera quien ocupara la presidencia de la Mesa Directiva, Fernández Noroña denunció que existía un pacto entre el PRI, Morena y el Gobierno federal; a pesar de que el PT contaba con expedientes suficientes para probar que tenían mayoría sobre el partido tricolor.
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