De acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el gobierno de Andrés Manuel López Obrador consiguió una leve reducción en la incidencia de los homicidios dolosos, un hecho que no se había logrado en cinco años.
Una gráfica publicada por dicha institución muestra que el número de asesinatos intencionales cometidos el año pasado fue de 36 mil 476, mientras que en 2018 fue de 36 mil 685, una reducción del 0.57 por ciento. Si bien el descenso es marginal –apenas 209 casos de diferencia-, marca un cambio de tendencia con respecto al sexenio anterior.
Durante el gobierno de Enrique Peña Nieto, el crecimiento en la comisión de este delito se dio de manera exponencial. Entre 2014 y 2018 el número anual de homicidios de este tipo pasó de 20 mil 10 a 36 mil 685, un alza de más de 16 mil casos; siendo 2017 el peor año, cuando el número se disparó de 24 mil 559 a 32 mil 79, es decir, la tendencia incrementó en un 30 por ciento.
Otro delito en el que la administración de Andrés Manuel López Obrador ha logrado revertir la tendencia de su antecesor es el robo a vehículos. De acuerdo con información del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (Sesnsp), la tasa de comisión en este delito se ha reducido en un 24.8 por ciento desde diciembre de 2018.
En noviembre de 2018, último mes de la administración Peña, el número de automóviles que fueron sustraídos de sus dueños fue de 14 mil 828, mientras que el mes anterior se habían registrado 15 mil 544 de estos ilícitos. En agosto de 2020, el número total registrado por el Sesnsp fue de 9 mil 78 casos.
El número más bajo de este tipo de atracos se dio en abril de este año, durante el inicio de la cuarentena por la pandemia de COVID-19, cuando el número se redujo dramáticamente, pasando de 10 mil 924 en marzo a solo 8 mil 546. La cifra más baja alcanzada durante los últimos tres años del gobierno anterior se registró en marzo de 2015, con 11 mil 283.
Con información de INEGI y SESNSP.
Imagen: Polemón
