El Banco de México (Banxico) redujo sus expectativas de crecimiento para 2022 con respecto a sus informes previos, pasando las proyecciones del 3.2 por ciento anunciado durante el tercer trimestre del año pasado a solo 2.4 puntos porcentuales.
De acuerdo con el último reporte emitido por la principal institución financiera del país, el rango de previsión para el mes de diciembre se encuentra entre 1.6 y 3.2 por ciento, lo cual significa que la estimación puntual media es de 2.4 por ciento, ocho décimas por debajo de lo que se esperaba en septiembre de 2021.
Esta nueva proyección se ajusta a lo que ya había proyectado la secretaria de Economía, Tatiana Clouthier Carrillo, quien aseguró que el Producto Interno Bruto (PIB) de México crecería en torno a 2.5 o 2.6 puntos porcentuales tras el impacto que la ola de contagios de la variante Omicron de COVID-19 ha provocado en las primeras semanas del año.
La actividad económica mundial siguió recuperándose en el 4to trim, a un ritmo menor al esperado. Las perspectivas de crecimiento para 2022 y 2023 siguen apuntando a una recuperación gradual de la actividad económica. Las previsiones para 2022 se revisaron ligeramente a la baja. pic.twitter.com/i5KSe6eCnb
— Banco de México (@Banxico) March 2, 2022
Sin embargo, las expectativas de crecimiento económico para 2023 se incrementaron, ya que, en su evaluación anterior, Banxico colocaba este en 2.7 por ciento; mientras que ahora prevé que se alcance hasta el 2.9 por ciento de incremento durante el próximo año, a causa del nuevo incremento a las tasas de interés, que actualmente se ubican en 6 por ciento.
En cuanto a las expectativas de empleo, el banco central no cambió sus pronósticos del pasado mes de septiembre, cuando señaló que se espera la creación de entre 560 mil y 760 mil empleos a lo largo de 2022. Para el próximo ciclo, la previsión es de entre 510 mil y 710 mil nuevos puestos.
En lo que se refiere a la inflación –uno de los principales problemas, no solo en México sino a nivel mundial- el organismo reconoció que sus efectos han resultado ser más grandes y duraderos de lo que se esperaba. Sin embargo, se espera que esta se vaya reduciendo conforme avance el año.
Por ello, no se modificó la proyección previa, en la cual se espera que baje hasta el 4 por ciento, con lo cual se ubicaría en el límite superior del objetivo establecido, que es de 3 puntos porcentuales con una variación de +/- 1 por ciento; proyectando llegar a este punto hacia el segundo semestre de 2023.
Con información de El Financiero.
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