Aunque hace unos meses aseguró que era la accionista mayoritaria de OMEI, ahora Xóchitl Gálvez asegura que no tiene nada que ver con dicha empresa y que su pareja Rubén Sánchez es quien la encabeza.
Luego de que el Instituto Nacional de Transparencia (INAI) reveló que sí firmó al menos cuatro contratos con la compañía de mantenimiento de edificios de la candidata presidencial, esta aseguró en redes sociales que todos los convenios son legales y que la empresa pertenece a su compañero sentimental.
Sin embargo, la primera vez que surgieron dudas sobre las adjudicaciones recibidas por parte de su empresa mientras se desempeñaba como funcionaria pública, Gálvez Ruiz admitió que ella es la socia mayoritaria de OMEI, con Sánchez y su hija Diana Vega ocupando un rol minoritario en el control.
Dicho episodio causó burlas en las redes sociales debido a que la candidata de la coalición PRI-PAN-PRD afirmó con orgullo poseer el 80 por ciento de las acciones, mientras que su pareja controlaba el 30 por ciento y su hija otro 20; suma equivocada que llama la atención por parte de una ingeniera.
En días pasados, el portal Sin Embargo publicó un reportaje en el que detectó diversas inconsistencias en las biografías sobre la candidata publicadas recientemente, vinculadas con su estado civil, la paternidad de su hija o la constitución de sus empresas.
En el caso de OMEI, detectaron dos actas registradas: una de 2011 que la coloca como accionista principal y en la que cedió el control a Diana; y otra de 2014, en la que esta última no figura como apoderada legal ni socia.
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