Integrantes de la comunidad otomí y elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) protagonizaron un enfrentamiento este domingo, luego de que estos últimos intentaran desalojar a los indígenas de la llamada Casa del Pueblo.
El pasado 14 de octubre, el Congreso Nacional Indígena (CNI) emitió un comunicado en conmemoración, tanto de los 27 años de su fundación como del tercer aniversario de la ocupación de la sede del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), refrendando más de 500 años de resistencia indígena.
El domingo por la noche, usuarios de redes sociales denunciaron que las autoridades de la Ciudad de México enviaron un contingente masivo de policías para intentar desalojar las oficinas tomadas y ocupadas por indígenas de origen otomí en 2020, los cuales golpearon a los ocupantes.
Sin embargo, estos lograron repeler el ataque de la policía capitalina, la cual cargó contra ellos pese a que había niños y mujeres embarazadas en el lugar. También señalaron que las inmediaciones de la Casa del Pueblo -en la zona de Xoco- permanecían rodeadas por granaderos y vehículos policiacos.
Lo que sabemos sobre el desalojo contra comunidad otomí en la Casa del Pueblo
El equipo de The México News estuvo presente durante el enfrentamiento entre granaderos y representantes de la comunidad otomí, obteniendo más de quince minutos de filmación en los que se observan varias de las fases del enfrentamiento al sur de la Ciudad de México.
En los videos de denuncia aseguran que la SSC envió a ‘miles’ de granaderos para intentar desalojar a los manifestantes indígenas. Sin embargo, nuestras imágenes muestran que, si bien era un número elevado de elementos policiales, este difícilmente superaba las 200 personas; aún así, era una cifra exagerada para el número de personas que enfrentaron.
En la grabación obtenida por nuestro equipo editorial se observan cargas no solo por parte de los policías, sino también de los ocupantes otomíes. En un primer momento, estos últimos se lanzan con tubos de metal, extintores y otros objetos contundentes mientras el dispositivo policial retrocedía.
Ante la llegada de refuerzos para los uniformados, fueron estos quienes comenzaron a avanzar en contra de los manifestantes, encapsulándolos y forzándolos a volver a la Casa del Pueblo. Finalmente, el enfrentamiento terminó cuando estos últimos montaron una barricada con fuego alrededor de la sede del INPI.
Heridos durante enfrentamiento
Los videos de denuncia compartidos en redes señalan que los granaderos golpearon a varios de los ocupantes de las oficinas, mostrando sus rostros ensangrentados y amoratados por los impactos. Sin embargo, también lograron causar daño entre las filas de la policía capitalina.
Nuestro equipo captó la atención que prestaron a un par de elementos. Uno de ellos tenía dificultades para mantenerse en pie mientras sus compañeros tomaban foto de su escudo destrozado por los tubos de metal; mientras que, a unos pasos de distancia, inmoblizaban el brazo a una mujer policía.
El trato para los manifestantes que se quedaron detrás de las líneas policiales fue disparejo, pues un uniformado agredió a una mujer indígena que intentaba grabar. Al otro lado de la calle, dos mujeres policías intentaban calmar a una señora mayor que sufría un ataque de pánico, asegurándole que no le iban a hacer nada.
Llama la atención de nuestra redacción que esta última apareció posteriormente en los videos difundidos en las plataformas digitales como parte de los heridos.
