El presidente de la mesa directiva del Congreso del estado de Morelos, Alfonso de Jesús Martínez Sotelo, acusó a los integrantes de la anterior legislatura de haber saqueado las arcas de la legislatura estatal, dejando solo 2 mil pesos en efectivo para los gastos operativos de esta.
Esta es solo una de las irregularidades que los integrantes de la 54 Legislatura del estado encontraron a su llegada al Congreso local; ya que también tienen documentación que prueba que los diputados anteriores se repartieron una bolsa de 46 millones de pesos durante su último mes en funciones.
De acuerdo con Martínez Sotelo, de acuerdo con los papeles que encontraron, los exlegisladores, en su mayoría pertenecientes al PRD, habrían dispuesto de este dinero a través de la emisión de 30 cheques, lo que coincide con el número de diputados que había en Congreso anterior. Estos cheques llegaron a alcanzar la suma de 500 mil pesos en algunos casos.
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También descubrieron que desapareció la flota de vehículos que eran propiedad del Congreso morelense. Posteriormente encontraron contratos de compra-venta autorizados por la anterior presidenta de la mesa, Hortencia Figueroa Peralta. Estos contratos permitieron a los diputados hacerse de los automóviles a precios irrisorios.
Encima de las irregularidades ya mencionadas, la legislatura saliente dejó una deuda de 65 millones de pesos de pagos atrasados, sin contar los pagos de nómina y pensiones, que también heredarán a los diputados entrantes, los cuales tendrán que disponer de 50 millones de pesos para operar entre septiembre y diciembre.
Con información de Proceso y El Financiero.
