Bajo la dirigencia de Marko Cortés, quien afirma que serán un bloque sólido de oposición, el Partido Acción Nacional (PAN) alcanzó su punto más bajo desde que consiguió la Presidencia en el año 2000, tanto en representación legislativa como territorial.
En lo que respecta a las gubernaturas, el partido blanquiazul registró en 2022 sus peores números en un cuarto de siglo, pues apenas cuenta con cinco estados bajo su control, uno más de los que tuvo tras las elecciones de 1994 y uno menos que en 1996.
Esta caída resulta particularmente dramática, pues apenas cinco años antes obtuvo sus mejores registros en este rubro, cuando consiguió colocar a once gobernadores. Sin embargo, desde la llegada de Cortés Mendoza en 2018, la tendencia a la baja sigue acentuándose a un ritmo vertiginoso.
Esta situación no mejora tampoco en la Cámara de Diputados, en donde, pese a mejorar su desempeño entre 2018 -cuando registraron su número más bajo- y 2022, la representación panista en San Lázaro es aún menor a la que tenían en 1994, cuando ocupaban 119 curules, por las 114 actuales.
El Senado también es testigo del desplome sufrido por el PAN, pues desde que alcanzaron su mejor elección en 2006, la tendencia se mantiene a la baja. Seis años más tarde pasaron de 52 a 38 legisladores y para 2018 perdieron más de la mitad registrada doce años antes, con apenas 23 representantes.
Cabe recordar que, tras las elecciones federales de 2021, tanto Cortés como sus aliados del PRI y del PRD -’Alito Moreno’ y Jesús Zambrano- afirmaron que su alianza fue un ‘éxito’ pese a que Morena conservó su mayoría en el Congreso y arrasó con las gubernaturas.
Con información de Milenio.
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