Una de las apariciones más polémicas durante la ceremonia del Sexto Informe de Gobierno de Enrique Peña Nieto, fue sin duda la de Juan Armando Hinojosa Cantú. El polémico constructor se vio envuelto en algunos de los más notables escándalos de corrupción de este sexenio; y, a pesar de ello, llegó en calidad de invitado especial a dicho evento.
Cuando los invitados estaban a punto de tomar asiento, Hinojosa pasó por delante de la prensa que se encontraba cubriendo el evento. Uno de los periodistas presentes lo saludó a lo lejos y después le preguntó que si había vendido de nueva cuenta la ‘Casa Blanca’. El empresario sonrió de forma burlona y levantó el pulgar mientras se alejaba.
Este gesto socarrón por parte del dueño de Grupo HIGA es la última burla hacia una sociedad que exige explicaciones claras para los constantes escándalos en los que el gobierno se ha visto envuelto en los últimos seis años; de los cuales Hinojosa ha protagonizado dos que estuvieron relacionados entre sí.
De todos los episodios de cinismo que nos ha regalado @EPN, abrirle la puerta de Palacio Nacional a Juan Armando Hinojosa Cantú, es uno de los más insultantes.
Ahí están las disculpas presidenciales de la semana pasada por #LaCasaBlancaDeEPN.
Infelices. pic.twitter.com/uxdMC27rXM
— Alfredo Lecona (@AlfredoLecona) September 4, 2018
Grupo HIGA fue una de las constructoras que se vieron más beneficiadas por el gobierno durante la primera mitad de la administración de Peña Nieto, pero los escándalos de la ‘Casa Blanca’ y del famoso tren México-Querétaro destruyeron la credibilidad de Hinojosa y su empresa.
Sin embargo, la deficiente actuación de las instituciones en estas situaciones ha permitido que Armando Hinojosa Cantú no solo siga libre y operando con normalidad, sino que además sea invitado de lujo a los eventos de un gobierno que se caracterizó, precisamente, por la impunidad.
