A dos años ataque con ácido que desfiguró sus rostros y sus planes, la saxofonista oaxaqueña Maria Elena Ríos denuncia la complicidad que existe entre el Poder Judicial de la entidad y la defensa de Juan Antonio Vera Hernández, último implicado en el atentado contra su vida que sigue en libertad.
A través de su cuenta de Twitter, la artista originaria de Huajuapan denunció la impunidad que existe en torno a su caso, la cual es legitimada desde el Tribunal Superior de Justicia de Oaxaca (TSJ), pues este ha permitido que exista un conflicto de interés por parte del juez Víctor Jorge Luis Velasco Castellanos.
En primer lugar, Ríos Ortiz destaca el nepotismo que existe al interior del máximo órgano de justicia de la entidad, ya que el juez asignado a su caso resulta ser hijo de la magistrada Gregoria Hortensia Castellanos Chávez, titular de la Sala Constitucional y de la Cuarta Sala de lo penal en el TSJ.
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Sin embargo, esto no es lo más grave, sino que el juez Velasco Castellanos no se ha excusado de participar en el caso pese a que trabaja de la mano con la abogada Carla Pratt Corzo, quien encabeza la defensa del exdiputado Juan Antonio Vera Carrizal, padre del prófugo y principal autor intelectual del ataque.
Resulta que tanto Pratt –hija del abogado Carlos Pratt Straffon, dueño del bufete del mismo nombre- como el juzgador del caso están colaborando juntos como ponentes en un seminario en línea en el que se abordan temas como Teoría del Caso, Interrogatorio, Contrainterrogatorio y Objeciones, organizado por el Instituto de Ciencias Jurídicas de Oaxaca
Además de señalar el conflicto de intereses entre la defensa y el juez, María Elena acusó a este último de ser cómplice de sus agresores, pues estaría manipulando el caso en favor de estos. Por ello, hizo un llamado al Tribunal Superior de Justicia para que destituyan a Velasco y dejen de solapar estos actos de tráfico de influencias.
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En una segunda publicación, la artista aseguró que su fotografía no es la que se debe difundir, ya que ella no está huyendo de la acción de la justicia, sino la de Vera Hernández, quien continúa prófugo tras el intento de asesinato en su contra y quien es protegido por el juez, respaldado a su vez por el TSJ en el que labora su madre.
Tras haber terminado con una relación sentimental con Vera Carrizal –exdiputado del PRI- en la que sufrió de maltrato y quien seguía acosándola, la saxofonista fue víctima de un intento de homicidio perpetrado por unos individuos el 9 de septiembre de 2019, con quienes se encontró en una agencia de viajes en Huajuapan de León, pues presuntamente solicitaban una asesoría.
Imagen: Especial
