Un periodista del periódico Reforma acudió ante el gobierno de Estados Unidos para pedir su intervención en la disputa entre María Amparo Casar y Pemex. Sin embargo, los funcionarios de aquel país ignoraron su exigencia.
José Díaz Briseño, corresponsal del periódico capitalino en Washington D.C., acudió a una conferencia de prensa del Departamento de Estado para ‘acusar’ al gobierno mexicano ante las autoridades de ese país por la denuncia en contra de la directora de Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI).
El reportero mexicano calificó a Casar Pérez como una ‘paladina anticorrupción’ y aseguró que se trata de una acción intimidatoria contra observadores electorales de cara a los comicios del próximo 2 de junio; sin embargo, omitió mencionar la polémica pensión millonaria que la analista recibió pese a que su exmarido no calificaba para esta prestación.
Sin embargo, el funcionario estadounidense señaló que no tienen comentarios para ese caso y que dejarán que la justicia mexicana se encargue de ello. Ante esta respuesta, Briseño recordó que MCCI recibe fondos por parte el gobierno de la Unión Americana para sus actividades de ‘combate a la corrupción’.
Nuevamente, el portavoz desechó la petición del reportero del Reforma, señalando que ‘le da gusto’ que Casar reciba dinero de su país, pero que no tiene conocimiento sobre los detalles del caso, por lo que dejarán que el Poder Judicial de México actúe en consecuencia.
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