Una encuesta le otorgó la razón a Alejandro Rojas Díaz Durán, aspirante de Morena a la candidatura por la alcaldía Cuauhtémoc, quien ha afirmado en días pasados que ocho de cada diez capitalinos rechazan que Dolores Padierna y su esposo, René Bejarano, sean postulados a un puesto de elección popular.
De acuerdo con un ejercicio llevado a cabo por la empresa Massive Caller el pasado 4 de febrero, el 80 por ciento de los encuestados respondió en que no está de acuerdo en que Padierna y Bejarano sean postulados como candidatos por parte del Movimiento de Regeneración Nacional.
Por el contrario, tan solo el 5 por ciento se manifestó a favor de que el partido fundado por Andrés Manuel López Obrador le ofrezca al matrimonio la posibilidad de continuar avanzando en sus carreras políticas; mientras que el 14 por ciento restante no conoce el tema o no emitió una opinión al respecto.
En una segunda pregunta se cuestionó a los participantes por quién votarían para gobernar la alcaldía Cuauhtémoc en caso de que las elecciones fueran hoy. Ahí, Rojas encabezó las preferencias con el 32 por ciento, seguido muy de cerca por Néstor Núñez –hijo del exgobernador de Tabasco, Arturo Núñez- con el 31 por ciento. Padierna se ubica en tercer lugar con un lejano 16 por ciento y el 21 por ciento restante dijo no saber.
Durante los últimos días se ha incrementado la tensión entre Alejandro Rojas y Dolores Padierna, después de que el primero asegurara que tanto ella como su esposo representan ‘las ligas de la corrupción’, haciendo referencia al videoescándalo, en el que una grabación mostró a Bejarano recibiendo sobornos del empresario argentino Carlos Ahumada en 2004.
Debido a estas declaraciones, las cuales fueron plasmadas en un anuncio compartido en redes sociales, la diputada presentó una denuncia por violencia política de género ante el Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM), el cual determinó que la queja procedía y obligó a Rojas a retirar el spot.
Tras el fallo del IECM, el excandidato a la presidencia nacional de Morena aseguró que no se trata de un asunto personal contra su contrincante y retó al matrimonio a someterse a un debate público y una encuesta posterior. Agregó que quien resulte perdedor de este par de ejercicios debería retirarse de la política.
Con información de Massive Caller y Milenio.
Imagen: El Sol de México