El gobierno federal dio a conocer que, gracias a las reformas para lograr la adquisición de medicamentos desde el extranjero, se ha logrado un ahorro por 11 mil millones de pesos; además de exhibir las irregularidades de las compras consolidadas durante el sexenio anterior.
Desde Palacio Nacional, el presidente Andrés Manuel López Obrador y el secretario de Salud, Jorge Alcocer Varela, informaron sobre los datos de la reciente adquisición de fármacos, tal como lo había prometido el mandatario hace un par de días.
Durante el encuentro con los medios de comunicación, el doctor Alcocer reveló que, tras la reforma a la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios Públicos llevada a cabo en agosto de 2020, en la que finalmente se permitió la compra de insumos médicos desde el extranjero, se han logrado ahorrar 11 mil millones de pesos del presupuesto asignado a ese rubro.
Gracias a la asociación del gobierno mexicano con la Oficina de Naciones Unidas para Servicios y Proyectos (UNOPS), se logró la adquisición de 730 claves a diecisiete empresas distintas, procedentes de 17 países, que permitieron el acceso a 742 millones de medicamentos oncológicos, cardiológicos, endocrinológicos, hematológicos y contra el VIH, los cuales beneficiarán a más de un millón de mexicanos que reciben estos productos del sector público.
Sobre la oposición a dichas modificaciones por parte de legisladores de oposición, el funcionario señaló que estos no estaban legislando basados en la salud de los mexicanos, sino que estaban defendiendo los intereses de empresas particulares.
Alcocer también abundó sobre lo que sucedió con las compras consolidadas de medicamentos durante el gobierno de Enrique Peña Nieto, cuando un reducido grupo de empresas nacionales acaparó los concursos, embolsándose una suma astronómica de dinero a costa de la salud de los mexicanos.
En total, la administración anterior gastó 303 mil millones de pesos en la compra de insumos médicos, de los cuales 241 mil 191 millones fueron a parar a los bolsillos de diez compañías vinculadas a políticos prominentes, las cuales acapararon el 79,8 por ciento de las licitaciones.
Es decir, cuatro de cada cinco concursos que se realizaron para la compra de productos médicos fueron ganados por alguna de estas empresas. Además del beneficio para unos cuantos industriales, esto redujo la competitividad en el sector, ya que cada vez hubo menos participación en dichas licitaciones. Durante 2018, el 85 por ciento de las claves recibieron solo una o dos ofertas.
López Obrador, por su parte, señaló que había muchos intereses detrás de la compra de medicamentos, señalando que las empresas acaparadoras ni siquiera eran productoras de medicamentos sino distribuidoras de insumos médicos, las cuales estaban vinculadas a políticos y medios que se dedicaron a hacer negocio al amparo del poder público.
Lamentó que, pese a que eran los propios proveedores quienes provocaban el desabasto de medicamentos, se realizara una campaña de desprestigio en contra de su gobierno, recibiendo acusaciones de haber dejado sin medicamentos a niños y personas vulnerables.
Imagen: Sin Embargo
