Pese a que el Partido Acción Nacional (PAN) asegura que los vínculos entre Jorge Romero, Santiago Taboada y otros integrantes con el Cártel Inmobiliario son parte de una ‘persecusión política’, hasta el expresidente Felipe Calderón reconoció públicamente estos nexos.
Este miércoles, los blanquiazules ofrecieron una conferencia de prensa -cobijados por las dirigencias partidistas de la alianza Va X México- rechazaron las acusaciones presentadas por la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ-CDMX) sobre su implicación en el esquema de fraude inmobiliario, asegurando que estas son ‘ridículas’.
Romero Herrera aseguró que, al hacer público el testimonio del empresario que construyó el desarrollo City Towers en la alcaldía Benito Juárez, la FGJ violó el debido proceso; motivo por el cual presentarán denuncias por ‘persecución política’ ante la Fiscalía General de la República (FGR).
Durante años, señalamientos vincularon al grupo encabezado por el hoy diputado federal -al que también pertenece Taboada– con un esquema de construcción ilegal de departamentos en la alcaldía Benito Juárez, la cual dejó ganancias millonarias a un selecto grupo de desarrolladores conocidos como el Cártel Inmobiliario.
Las versiones sobre los malos manejos de Romero llegaron incluso hasta el expresidente Felipe Calderón Hinojosa, quien en su memoria Decisiones Difíciles, señaló al legislador como el ‘cacique’ que manejaba a su antojo el padrón de militantes de Acción Nacional en la Ciudad de México.
En el texto, el exmandatario recuerda que múltiples empresas acusaron a Romero de extorsión -modus operandi de los funcionarios ligados al Cártel Inmobiliario- y que este incluso confesó a un sobrino suyo que obtenía hasta 7 millones de pesos mensuales a través de las agrupaciones de comerciantes.
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