El presidente Andrés Manuel López Obrador respondió a las acusaciones realizadas por Francisco Labastida Ochoa y Porfirio Muñoz Ledo, quienes -de forma individual- aseguraron que existe protección a grupos vinculados al narcotráfico en su gobierno, y les exigió pruebas de sus afirmaciones.
Durante su conferencia de prensa de este viernes, el mandatario respondió a las acusaciones realizadas por ambos políticos, las cuales enmarcó dentro de una estrategia de desprestigio con tintes electorales que calificó de ‘vulgar y corriente’, con miras a las elecciones que se celebrarán en seis estados este domingo.
El tabasqueño expresó particular decepción por las palabras de Muñoz Ledo, pues asegura que el exdiputado lo conoce muy bien, por lo que le sorprende que haga ese tipo de declaraciones, las cuales asegura que son temerarias y sin ningún tipo de fundamento.
Con respecto a Labastida, excandidato presidencial recordado por su implicación en el escándalo de desvío de recursos públicos para su propia campaña conocido como ‘Pemexgate’, cuestionó su autoridad moral para denunciar cualquier tipo de irregularidad o pacto oculto, recordando que este también operó en favor del Fobaproa.
Recordó que, en la década de 1990 y desempeñándose como secretario de Gobernación de Ernesto Zedillo, el sinaloense se acercó a él personalmente para que votara a favor de convertir los pasivos generados por los bancos en deuda pública, invitándolo a cenar a su casa en varias ocasiones. Ante su negativa y una posterior gira, le habría advertido que corría peligro.
En entrevista con Carmen Aristegui, Labastida aseguró que existe un pacto de impunidad negociado entre el tabasqueño y Enrique Peña Nieto, a cambio del cual se le concedió el triunfo al lanzarse en contra del candidato del Partido Acción Nacional, Ricardo Anaya.
El mandatario añadió que la reaparición de ambos personajes es un ‘asunto de nostalgia’ y es precisamente este tipo de cosas las que refuerzan su intención de retirarse de la política una vez que concluya su periodo, ya que ‘lo peor’ que puede pasar en ese medio es hacer el ridículo.
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